|| Agustín Martín Encinas recogió con gran emoción el galardón Francisco Rodríguez Pascual que la Tertulia Cofrade Pasión le entregó en la Noche Cofrade el pasado sábado. El protagonista de la velada recordó al afamado antropólogo, al que él mismo -en su etapa como secretario de la Junta Permanente de Semana Santa- invitó a ser pregonero oficial en 1991. Revivió la figura de don Paco como "una persona seria y sencilla" que le hizo valorar la celebración de la Semana Santa en su conjunto, tanto la urbana como la rural. De ahí que para Martín Encinas sea un orgullo recibir un galardón que lleva el nombre de alguien a quien admiró. También recordó su etapa como representante de las hermandades salmantinas, cuando la institución arrastraba deudas elevadísimas y lo mucho que organismos como la Diputación contribuyeron a remontar la situación.

Lugar especial ocupó en su agradecimiento su familia de la Hermandad del Silencio del barrio de Pizarrales. Le acompañó en la cena un puñado de miembros, entre ellos su actual presidenta, Ana Iglesias, y el capellán y párroco de la sede canónica, la iglesia de Jesús Obrero, Jorge García. También dio las gracias a esta asociación cultural por un reconocimiento, decidido el pasado mes de mayo, que considera "inmerecido".

El presidente en funciones de la Tertulia Cofrade Pasión, José Manuel Ferreira, brinda con el galardonado Agustín Martín Encinas: Foto: Pablo de la Peña

Asistieron a esta Noche Cofrade en el restaurante San Polo representantes de la Hermandad de la Soledad y del Cristo Yacente, además del hermano mayor de la Cofradía del Humilladero de Peñaranda, que como galardonado en 2013 se encargó de entregar la estatuilla de Vicente Cid como premio. Lo hizo confensando su orgullo y la importancia que en la corporación de la villa salmantina tuvo esta distinción. Además, participó en esta cita, en nombre de la Junta de Cofradías, Carlos Vicente, uno de sus vocales.

El presidente en funciones de la Tertulia Cofrade Pasión, José Manuel Ferreira, resaltó lo importante que ha sido el ejemplo de Martín Encinas, que después de dejar los cargos ha seguido colaborando, como uno más, cuando lo que se está viendo continuamente en la Semana Santa es que tras el abandono del cargo sigue el abandono de la institución.